Conteo Ciclista en Las Vegas: Historia de cómo una ciudad multiplica sus ciclistas

Antes de empezar a hablar del uso de la ciclovía (ciclorruta) más importante del sur de la ciudad, vamos a describirla para quienes no son de la ciudad o no la han usado aún.

La Ciclorruta de Las Vegas está ubicada en el suroriente de Medellín, sobre la segunda vía más importante de este sector, la cual cuenta con la mayor cantidad de autos per cápita de la ciudad. La ciclorruta inicia en la Universidad EAFIT y termina en Ciudad del Río. En este punto se conecta con la ciclorruta que fue construida años antes que va hasta Punto Clave, también, sobre las Vegas y, luego, se conecta con la ciclorruta de Palacé. Por esta ciclorruta se puede llegar hasta las puertas del centro de la ciudad. Esta es la vía más corta de conexión de todo el sur-oriente de la ciudad con el centro, No es cualquier cosa que Medellín haya decidido construir una ciclorruta en una de las principales vías de la ciudad, pues así conecta una de las comunas que más vehículos particulares tiene y con los barrios donde la gente pierde más tiempo debido a la congestión.

El diseño de esta ciclorruta no es el más cómodo, pero si es el más eficiente, pues al estar en el separador de la avenida Las Vegas hace que su trazado sea algo sinuoso, al tener que esquivar algunos árboles. Algunos de sus tramos se elevan y otros están a nivel de calzada; no es un trazado muy coherente, pero cumple muy bien su función.

Este diseño fue hecho por EAFIT, para el Área Metropolitana, el cual fue aprobado por planeación en el año 2015 y construido en el 2017. Dos alcaldes tuvieron que ver con su implementación, lo que se ha vuelto una constante en Medellín. Muchos importantes proyectos han requerido el compromiso de varios alcaldes para que se pueda realizar, pues el tiempo que requieren para su ejecución no es suficiente bajo el periodo de uno de ellos, pues son inmensos retos que este tipo de proyectos implican.

Desde Más Urbano nos ocupamos, desde hace varios años, en realizar conteos de ciclistas por las ciclorrutas para determinar su uso. Empleamos un sistema mixto de conteo, por una parte, contamos de forma manual, en intervalos de 15 minutos en la hora pico de la mañana (5:30 a 8:00 am) y en hora pico de la tarde (16:30 a 19:00). Los horarios son elegidos al analizar la encuesta origen y destino y desagregando solo los viajes en bicicleta, Ponemos especial atención en seleccionar un día típico del corredor, por ejemplo, cuando los colegios y universidades no estén en vacaciones, que no existan eventos ese día, ni el día posterior, que sean días soleados y que sean el mismo día de la semana. El estudio se apoya con una cámara ubicada a 3 metros de altura, para poder desagregar del número total de ciclistas, otras cifras que quisiéramos tener, como, por ejemplo, el porcentaje de mujeres, los que usan casco, los tipos de bicicletas y, últimamente, los vehículos eléctricos.  Ubicamos la cámara en un punto especifico, a la entrada de la Institución Educativa INEM, en el costado occidental mirando hacia el norte. Elegimos el tercer jueves del mes de julio, donde, por suerte, las condiciones urbanas y meteorológicas han sido las mismas.

Estos conteos sobre Las Vegas los comenzamos a hacerse desde el 2017, justo antes de que empezarán las obras de la ciclorruta. En ese entonces lo hicimos entre las 5:30 y las 8:00 de la mañana, contamos que más o menos pasaban unos 100 ciclistas y, en horas de la tarde entre las 5:30 y las 8:00 pm, disminuía a unos 80 ciclistas.

La obra tomó más o menos un año para estar completamente lista. Los retos y dificultades fueron inmensos en temas viales, cruces semafóricos y el respeto debido a todos y cada uno de los árboles que existían. Todo esto hizo que solo hasta julio del 2018 estuviera casi completa. En este momento volvimos a contar y los números no cambiaron, solo se dio un mínimo incremento, lo que no era representativo, de 100 que contamos en 2017 se pasó a 103, en las horas de la mañana y de 80 a 81, en las horas de la tarde.

Lo realmente impresionante sucedió al año siguiente, con la difusión por medios de la ciclorruta, la promoción de medios de transporte menos contaminantes, hizo que, en un año, en el que Medellín sufrió dos crisis ambientales, se entendiera que era más rápido moverse en bicicleta que por cualquier otro medio por esta vía. Las cifras se triplicaron, los ciclistas pasaron de 103, en 2018, a 289, en 2019, en las horas de la mañana y de 81, en 2018, a 300, en 2019, en horas de la tarde. Lo que más nos llamó la atención fue el aumento en el número de mujeres que usaban la bicicleta, como medio de transporte y, por supuesto, de estudiantes de EAFIT y empleados de clínicas del sector.

En unas entrevistas realizadas en la ciclorruta, en ese año, la mayoría manifestaba que principalmente un elemento de disuasión para su uso era La Aguacatala.

En el 2020 llegó la Pandemia y no pudimos realizar conteos, lo mismo nos pasó en el 2021 y, por problemas internos en Más Urbano, tampoco fue posible hacerlo en 2022. Sin embargo, por las noticias y por algunas observaciones se sabía del incremento en estos años del uso de la bicicleta. Se hablaba de un boom ciclístico mundial, pues era la principal manera de mantener el distanciamiento social y de realizar ejercicio de forma segura, lo que llevo a un considerable incremento en las ventas de bicicletas.

En 2023 volvimos a realizar conteos en Las Vegas, aunque notamos un incremento en las horas de la mañana (pasamos de 289 a 342) no vimos lo mismo en las horas de la tarde. Tenemos algunas hipótesis que podrían explicarlo, lo primero es la aparición de la ciclorruta de Guayabal, los ciclistas por seguridad podrían tomar la decisión de cruzar el río para ir por Las Vegas, pues luego de la aparición de la ciclorruta sobre el costado occidental dejaron de hacer el sobrerrecorrido; la segunda es que puede deberse a una variación en los horarios en los que se mueven los ciclistas, sobre todo los del sur, o por el teletrabajo, la flexibilidad de horarios, o el sentirse más seguros en vías sin ciclorruta, pueden causar la disminución en el corredor. Estas hipótesis solo podrán ser verificadas cuando tengamos la nueva encuesto origen y destino.

La tendencia en las cifras de ciclistas para el 2024 y 2025 es preocupante, pues pasamos de tener 342 ciclistas en horas de la mañana a 281, en 2024 y 231, en 2025, esto se puede explicar por un incremento de vehículos individuales eléctricos y de motos, que después de la pandemia han disminuido de precios, a esto se suma la falta de regulación para transitar por las ciclorrutas, lo que parece ha seducido a varias personas a cambiar la bicicleta por este tipo de vehículos, cada vez es más común verlos por la ciclorruta.

Si se mantiene este descenso en el uso de la bicicleta sería una causa de preocupación, pues la bicicleta hoy en día es el vehículo más efectivo en términos de consumo de energía, de salud pública, con su uso se disminuyen las enfermedades asociadas con el sedentarismo, pero también ayuda a disminuir las cifras de incidentalidad vial y los costos derivados de la infraestructura, ni se diga, ya que es mucho más barato la construcción y mantenimiento de este tipo de vías que las de otros tipos de vehículos.

La ciudad pierde muchísimo si los ciclistas disminuyen, no es solo cuestión de moda, es porque las políticas públicas que las promueven son beneficiosas para quienes las usan, como para quienes no.

¿Se te ocurre alguna otra razón que explique la disminución del uso de la bicicleta? Queremos escuchar todas las hipótesis que tienes, para poder contribuir a revertir esta tendencia.